25.3.25

Arte Moderno de Calle, con Luz y Sonido en Zaragoza


Complementar el urbanismo con montajes temporales no siempre parece barato. Pero tampoco somos capaces de entender siempre, la reversión que supone cualquier inversión, y admito que llamar inversion a una propuesta artística es casi un drama mental.

Tenemos que entender que la Cultura tiene muchas formas, y que desde lo público, hacer Cultura no es solo lo que creemos como fácil y habitual. 

Las ciudades se mueven, no todas por igual, y las que se quedan atrás, pierden el ritmo y la velocidad.

Este montaje en Zaragoza fue visto por miles y miles de zaragozanos en un fin de semana muy completo, y en una ciudad que no había realizado este tipo de trabajos en la calle casi nunca.

Luego, sí, ha sido muy criticado el coste. Pero sacar a miles de personas en varias tardes noches ni es sencillo ni puede ser a coste cero. ¿Qué rentabilidad tiene que Zaragoza figure en las listas de ciudades que quiere hacer estas intervenciones?

24.3.25

Nos estamos cociendo, pero no nos damos cuenta


No tenemos que pensar como todos los demás, esto que vemos en la pintada de calle es negativismo simpático, un poco de humor urbano, pues tomárselo en serio sería peligroso y de bobos.

En Bilbao, en las calles céntricas, alguna persona ha puesto este mensaje.

"La radiación nos está cocinando"

Que uno al leerla no sabe bien si se refiera a los hornos microondas o a la contaminación, a los bulos, o a las guerras encubiertas de unos contra todos los que nos meneamos.

Lo malo no es morirse por la radiación, lo peor es que de verdad nos estén cocinando, pues eso es lento y debe doler. O al menos picar.

Llevamos millones de años cocinándonos, los humanos solos miles de años. Siempre lo han llamado: Volverse viejo.

Una fachada de Bilbao con Arte en su pared


El Arte Urbano es salir de caza y pillar bicho. Es mirar un poco hacia arriba y observar, pues más de la mitad de los trabajos artísticos urbanos están ligeramente más altos que nuestra mirada.

Esta es una fachada de un edificio de viviendas en Bilbao. Simplemente alguien —el arquitecto o la Comunidad de Vecinos— decidió colocar una escultura a modo de montaje cerámico en una fachada sosa de ladrillo, para darle vida al conjunto. 

Se utilizó el Arte para dar valor a una pared muy grande de ladrillo rojo, que casi apabullaba la entrada a las viviendas. El Arte Urbano sirve para muchas cosas, incluso para disimular el ahogamiento visual.

Sí al Arte Urbano en Zaragoza


Sí creo en el valor del Arte Urbano como elemento generoso con las personas. Ese bienestar emocional que tantas veces pedimos con la boca pequeña se compone de infinitas posibilidades que no siempre queremos valorar.

Tenemos que salir de nuestras cuevas oscuras, o nos tienen que sacar, que daría igual. 

Tenemos que salir a la calle y respirar colores nuevos, formas que nos alumbren y sorprendan, sensaciones urbanas junto a otros urbanos.

Tenemos que aprender que lo uno no sustituye a lo otro, que el Arte es menos caro que muchas otras cosas que consumimos sin necesidad.

Yo sí creo en el valor del Arte Urbano de calle, sea del que sea, gratuito como los grafiti, como los murales, o de pago como las instalaciones internacionales que van recorriendo ciudades.

Si en Zaragoza no queremos Arte Urbano, lo que sucede es que se van a otras ciudades, a mostrarse a otros ciudadanos de otras ciudades. 

Es curioso que en unas ciudades admiren lo que en otras ciudades aborrecemos.


Somos una sociedad fantasma de nosotros mismos


En las calles somos seres difusos, ocupamos espacios, pero si no nos reconoce nadie somos como bultos que vamos moviéndonos como todos los demás, en unos espacios abstractos.

Nadie somos nadie en concreto, si acaso lo somos para nosotros o para quien nos reconozca. Para los demás somos como fantasmas de colores, y porque vamos vestidos, si no fuera así, seríamos más grises todavía.

17.3.25

Un gato callejero, simpático


Un gato callejero puede ser más que un gato de calle. Puede ser también un deseo, una gracia, un dibujo, un toque de humor o de arte.

Un gato callejero siempre alumbra la calle por la que se pasea.

6.3.25

Space Invaders en las calles de Bilbao


Un Space Invaders en Bilbao, cuando se montó y ahora ya con los años a cuesta. El tremendo desgaste del Arte Efímero en las calles de nuestras ciudades. Por cierto en la ciudad de Bilbao hay varios de ellos repartidos por sus calles.



1.3.25

Arte Urbano en la ciudad de Oporto. ¿Arte?


El llamado Arte Urbano también puede ser desagradable, inoportuno, violento, incluso asqueroso. Este es un ejemplo de ello, visto en Oporto. ¿Qué sentido tiene hacer este trabajo con plantilla y a dos colores?

¿La crítica violenta es contra los que llevan corbata?