Necesitamos escribir en donde se nos lea aquello que nos duele. Escribir es sacar los monstruos que llevamos dentro. Y por eso la sociedad no se calla.
Con la violencia contra las mujeres lo que realmente se quiere decir es que ya vale de esa violencia contra las personas que se consideran más frágiles.
Los monstruos hieren a las mujeres por verlas más fáciles de herir y a su vez más suyas, como si fueran mercancía que se puede romper o tirar.
Somos seres humanos, pero es verdad, no todos somos igual de humanos.
Necesitamos muchas más educación desde la niñez, educación humanista, de seres humanos a seres humanos.
Mientras tanto, seguiremos gritando por las aceras, seguiremos dejando mensajes de dolor, de rabia, de lágrimas por la incapacidad para dominar a las bestias.