29.9.25
Un Zaragozano enfadado y con la cara morada
También en Zaragoza hay señores enfadados y con muy mala cara, personajes pintados en los muros y que dan miedo, cuentistas muy morados que asustan a los viandantes.
Por la noche te salvas porque —según me cuentan— no se mueve, pero puede ser peligroso si vas ensimismado y observas que se le frunce todavía más el gesto de la boca.
En ese caso hay ya pocas cosas distintas al ponerte a correr, y que puedas hacer con éxito si quieres huir de estas visiones.
Pero hay que observarlo de cerca, si no se le mueve la boca, tranquilos, es que sigue pegado a la pared.
